La Mejor Historia de Todas

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Cómo Comenzar a Andar con Jesús

Comenzar una relación con Jesús es como conocer a alguien por primera vez. Aunque Jesús sabe todo acerca de nosotros, queremos llegar a conocerlo profundamente por nosotros mismos. Logramos esto cuando aprendemos quién era y qué dijo Él. Nos familiarizamos con su voz y nos rendimos a su liderazgo y verdad sobre nuestras vidas. Caminar con Jesús comienza en un momento, pero el viaje persiste durante el resto de nuestras vidas a medida que aprendemos, crecemos y perseveramos en decirle sí a Él y a Sus caminos.

La Biblia

Leer la Biblia es una excelente manera de comenzar tu viaje con Jesús. Después de todo, la Palabra de Dios cuenta la historia de la humanidad y nos lleva a Él. Pero abrir las páginas de un libro tan grande, con numerosas traducciones, capítulos y autores, puede resultar abrumador. Un buen lugar para comenzar es leer los primeros cuatro libros del Nuevo Testamento (Mateo, Marcos, Lucas y Juan), también conocidos como los Evangelios. Estos comparten cuatro relatos complementarios de la vida y el ministerio de Jesús.

Una organización llamada BibleProject te ofrece recursos útiles tales como videos, podcasts, blogs y mucho más, para ayudarte a comprender mejor lo que estás leyendo. Puedes acceder a estos recursos haciendo clic aquí.

La Oración

Hablar con Dios es una gran manera de acercarse a Él. Nos permite compartir nuestra vida con Él y escuchar Sus respuestas. Puedes dar gracias, hablar de tus emociones o compartir tus dificultades. Una gran manera de comenzar tu viaje es repitiendo esta sencilla oración.

“Señor Jesús, creo que eres el Hijo de Dios. Creo que moriste por mis pecados. Por favor, perdóname por mis pecados y entra a mi vida. Creo que resucitaste de entre los muertos y hoy estás vivo. Te recibo como mi Señor y Salvador. Te seguiré por el resto de mi vida. Amén".

El Bautismo

Un tema constante que vemos en la Biblia es la instrucción para que los seguidores de Jesús sean bautizados. Cuando somos bautizados en aguas, participamos de un acto simbólico que representa la muerte, sepultura y resurrección de Jesús. Nos alejamos de nuestra antigua forma de vida y somos limpiados. El bautismo es una invitación a hacer una declaración pública de nuestra fe. Si deseas dar el siguiente paso en tu viaje de fe y bautizarte, la mejor oportunidad para hacerlo llegará al unirte a una iglesia local.

“Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate, bautízate y lava tus pecados invocando su nombre”. (Hechos 22:16 RVR1995)

Comunión

Construir relaciones con otros cristianos y ser parte del Cuerpo de Cristo es vital para desarrollar una relación con Jesús. En la Biblia, vemos la intención de Dios de utilizar la Iglesia para llevar a cabo su plan y bendecir a otros. Asistir a un servicio semanal en la iglesia nos ayuda a crecer espiritualmente mientras escuchamos la enseñanza bíblica. Nuestro viaje cristiano no está diseñado para ser recorrido solo, y asistir a una iglesia es una excelente manera de rodearse de una comunidad de creyentes con la que caminar por la vida.

“Perseveraban unánimes cada día en el Templo, y partiendo el pan en las casas comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos”. (Hechos 2:46-47)

Encontrar una iglesia puede ser una experiencia muy emocionante pero también abrumadora. Puede que vivas en una ciudad con iglesias en cada esquina y te resulte difícil elegir una. O tal vez no conoces de ninguna opción cerca de ti. Un excelente lugar para comenzar es con la tarjeta La Mejor Historia de Todas que recibiste, y que te llevó a este sitio web. ¿La persona que te la presentó asiste a una iglesia local? ¿O conoces a otros cristianos que asisten a una iglesia? ¡Únete a ellos! También puede buscar iglesias en línea, leer acerca de sus creencias y pedirle a Dios que te guíe al lugar correcto.

Hablar de Jesús

La historia de tu vida tiene poder. De dónde vienes y lo que Jesús ha hecho en tu vida puede guiar a otros hacia Él. Tu testimonio es una evidencia del corazón de Dios y de Su búsqueda de toda la humanidad. Ser un testigo de Jesús es tan simple como compartir tu historia con los demás.

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